revuelve grave me acierta sin más
Sacrificios ridículos no me recordaba
un cerco y la quiebra
apaga las luces
desapareció de su rastro de las huellas, pies de trapos la piel palpa ciega
salvar tiempo en la mina de diamante pasados largos veranos con los ojos muy fijos, muy fijos testimonios
el niño miraba en el rostro vacío muy cansadas
tumbas para gacelitas y les rompieron las patas en cruz
suspiraban las gacelitas
sembradas entre muertos y armas químicas