deslizarse el silbido hasta la carne magra
horas y días y años y siglos de honda carne y rompe al vuelo
las pieles del agua
años y matas de años el alambre de espino pobre
ceñido luego
se acicala hacia dentro del segundo, alli
en el origen del día y la noche
la claridad melancólica paz de alcanzar
No hay comentarios:
Publicar un comentario